Hábitat de los reptiles en España
Hábitats terrestres
Desiertos ibéricos
El sureste español se caracteriza por tierras áridas, como es el caso del desierto de Tabernas, en Almería. Además de muchas otras especies, los reptiles encuentran un refugio en los desiertos ibéricos. Aquí, la falta de agua es compensada por la adaptabilidad de lagartos para conservar la humedad y regular su temperatura corporal. Algunas especies que viven aquí son el lagarto ocelado y la lagartija colirroja, muy adaptada a suelos blandos y arenosos.
Bosques mediterráneos
Los bosques mediterráneos, presentes en varias regiones de España, albergan una rica diversidad de reptiles. Serpientes como la culebra de escalera encuentran escondites entre la hojarasca, mientras que lagartijas, como la ibérica, disfrutan de la abundancia de insectos que prosperan en este ecosistema.
Hábitats acuáticos
Dentro de los hábitats acuáticos, que son la procedencia de estos animales, encontramos los siguientes:
Humedales costeros
Los humedales costeros, como los presentes en la desembocadura de ríos como el Guadalquivir, ofrecen un hábitat acuático crucial para reptiles como la tortuga mora. Estos reptiles, adaptados para la vida entre el agua y la tierra, encuentran en estos humedales un refugio seguro y una fuente abundante de alimentos.
Ríos y embalses
Las serpientes acuáticas, como la culebra de collar, encuentran su hogar en ríos y embalses de agua dulce en diversas partes de España. Estos reptiles han evolucionado para cazar presas acuáticas y disfrutar de la diversidad de hábitats que ofrecen los cursos de agua.
Hábitats montañosos
En tercer lugar, y en función de las condiciones que se den en estos espacios, algunos reptiles también han sido capaces de adaptarse a las altitudes elevadas y sobrevivir.
Sierras y montañas
Las sierras y montañas de España brindan hábitats montañosos a reptiles como el lagarto de Bocage, que ha desarrollado adaptaciones específicas para sobrevivir en altitudes elevadas. La capacidad de regular la temperatura corporal se vuelve crucial en estos entornos, donde las condiciones pueden ser extremas.
Incompatibilidades con la presencia humana
Si bien los reptiles se suelen mantener en sus espacios naturales y se alejan de los humanos. Nosotros, como especie, hemos invadido todos y cada uno de sus hábitats naturales. La consecuencia son múltiples conflictos que pueden llegar a suponer la muerte de estas criaturas. Por ejemplo, las carreteras o las infraestructuras de transporte. Además de ser atropellados, los reptiles de pequeño tamaño quedan atrapados o sepultados bajo estas construcciones.
Para evitar que suceda o minimizar el impacto, en Faunatek utilizamos cercados para pequeña fauna que permiten su salida, pero impiden que puedan volver a donde se encontraban. De este modo, quedan protegidos de zonas de alto riesgo para ellos, y no se les causa ningún daño al moverlos.
Si quieres contribuir a la protección de los reptiles y los anfibios o evitar que entren en tus cultivos, contacta con Faunatek y te asesoraremos en función de tus necesidades particulares.