El jabalí, o Sus scrofa, es uno de los mamíferos más comunes en España. Y es, también, uno de los que más noticias acapara por el número de individuos que hay actualmente en el país. Pero, ¿cuál es el depredador del jabalí? Hoy te lo contamos.
Origen del jabalí en España y situación actual de esta especie
El jabalí es un animal autóctono de Europa, Asia y el norte de África. En España, su presencia data de tiempos prehistóricos y ha sido una parte integral de los ecosistemas ibéricos. Este mamífero se caracteriza por tener un cuerpo robusto, cubierto de un pelaje espeso y cerdoso, y con un color que varía del marrón oscuro al grisáceo. Los machos suelen ser más grandes que las hembras, y pueden llegar a alcanzar un peso de hasta 150 kilogramos.
Los jabalíes son omnívoros y tienen una dieta variada que incluye raíces, frutas, insectos, pequeños vertebrados y carroña. Tienen una gran capacidad para encontrar alimento en diversas condiciones, y es por eso que han podido prosperar en diferentes hábitats, como bosques densos, zonas agrícolas y periurbanas.
En las últimas décadas, la población de jabalíes en España ha aumentado considerablemente. Algunos de los factores responsables son la reducción de sus depredadores naturales, la disponibilidad de alimentos en zonas agrícolas y la capacidad de adaptación del animal. Por los conflictos que se originan con los humanos, como la destrucción de cosechas y la rotura de contenedores de basura, hay una creciente preocupación por el desarrollo de esta especie.
¿Cuál es el depredador del jabalí?
Ante esta situación, cabe preguntarse cuál es realmente el depredador del jabalí en un entorno natural. Tradicionalmente, tenían varios en la península ibérica. Entre los principales se encontraban el lobo ibérico, canis lupus signatus, y el oso pardo, ursus arctos. Estos grandes carnívoros eran los que se encargaban de controlar la población de jabalíes, para que se mantuviera un equilibrio ecológico en los ecosistemas.
El lobo ibérico, como principal depredador del jabalí, caza en manadas, por lo que era capaz de abatir tanto a ejemplares jóvenes como adultos. Su presencia aseguraba que la población de jabalíes no creciera de forma descontrolada. El oso pardo, aunque menos especializado en la caza de jabalíes, también contribuía a regular su número, especialmente mediante la depredación de crías.
¿Qué ha sucedido con los depredadores naturales del jabalí y qué consecuencias ha tenido?
A lo largo del siglo XX, la persecución humana mediante la caza y la destrucción de hábitats naturales llevaron a una disminución drástica de las poblaciones de lobos y osos en España. En algunas regiones, estas especies fueron prácticamente exterminadas. La ausencia del depredador del jabalí ha tenido como consecuencia la situación en la que nos encontramos ahora, con una población de jabalíes que crece sin control.
Pero además, este crecimiento descontrolado ha causado numerosos problemas. En el ámbito ecológico, la sobrepoblación de jabalíes puede llevar a la degradación de los hábitats, ya que estos animales remueven el suelo en busca de alimento y alteran la estructura de la vegetación.
En el ámbito agrícola, los jabalíes pueden causar graves daños a los cultivos, con las consecuentes pérdidas económicas para los agricultores. Además, la proximidad de los jabalíes a las áreas urbanas ha aumentado los accidentes de tráfico y los conflictos con los seres humanos.
Soluciones a los conflictos con los jabalíes
La ausencia del depredador del jabalí hace que se deban tomar medidas para frenar los conflictos que se producen entre esta especie y los humanos. La propia caza, responsable principal del problema, ha intentado reducir su población, pero ha sido ineficaz. Además de apostar por métodos anticonceptivos, se puede apostar por otras medidas que, al menos, pueden reducir los inconvenientes de su presencia. Por ejemplo:
– Vallas y cercados que impidan el paso de estos animales a determinadas zonas, como las agrícolas o las carreteras. Puede tratarse de un vallado estándar, de placas electrificadas o de un cercado virtual.
– Repelentes olfativos en spray o en aspersión, con olor al depredador del jabalí y, por tanto, con efecto disuasorio.
– Protecciones para contenedores de basura.
En Faunatek somos especialistas en la resolución de todo tipo de conflictos con animales salvajes, como anfibios y reptiles, cérvidos, aves, pequeña fauna y, sobre todo, el jabalí. Si tiene algún problema de difícil resolución con alguno de estos animales, contacta con nosotros y realizaremos un estudio de las soluciones más adecuadas.
